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martes, 27 de marzo de 2012

Sólo sé que no sé nada (Sócrates)

Introducción:

Cuanto más aprendo, más me doy cuenta de que no sé tanto como yo pensaba.
Es muy fácil caer en el error de creer que se sabe todo sobre algo en concreto. Por ejemplo, a lo mejor terminas una carrera y cuando hablas con alguien sobre un tema del que te han examinado en la Universidad, piensas que la otra persona (como no tiene estudios superiores en ese campo) no sabe de qué está hablando.
A mí me ha pasado. Yo he estado en esa situación en la que he creído que sabía más que la otra persona en esa conversación hablando sobre algo que yo había estudiado en la Universidad. Craso error. Si me siento superior (sé más) por haber estudiado la carrera, me estoy autolimitando. Estoy cerrándome a que esa otra persona me pueda enseñar algo. Es verdad, a lo mejor no me puede enseñar algo nuevo sobre lo que yo he estudiado en la Universidad (a lo mejor sí) pero seguro me podrá enseñar sobre otras cosas.
Cuando etiqueto a alguien y sus conocimientos según su nivel de estudios, estoy elevando un muro que evita el flujo normal de información. Y, de nuevo, me autolimito. Estoy impidiendo que me pueda enseñar algo muy valioso que pueda o no tener algo que ver con los estudios de la carrera (eso es irrelevante).

Algunos ejemplos de sobre quién/qué se aprende y mucho serían:

  • Un@ niñ@
  • Un animal
  • Un insecto
  • una planta
  • un@ ancian@ sin estudios de ningún tipo
  • un bebé
  • un paisaje

¿Qué ocurre si la otra persona sabe más?

De todas formas, también ocurre que, incluso sin haber estudiado la misma carrera o carrera alguna, esa otra persona puede enseñarme cosas. Puede que no me guste, puede que mi ego se sienta atacado y no quiera reconocer que esa persona sabe más que yo sobre ese tema en concreto. Cuando eso ocurre siempre tengo al menos estas dos opciones:
  • Aceptarlo como tal, como una cosa más que puedo aprender
  • Ignorarlo. De forma que no lo acepto y me cierro a que esa persona sin estudios pueda saber más sobre lo que yo he estudiado en la carrera universitaria. Lo que ocurre en este segundo acaso es que pongo freno a mi crecimiento. Como persona primero y como profesional o estudioso en ese campo, en segundo lugar.

Intrusismo:

Estudiar una carrera y acabarla no significa que se sepa todo sobre ello. Cuántas veces habrás oído decir: “Adolfo no tiene carrera pero sabe mucho más que los que salen de la Universidad”.
Una situación en la que puedes sentirte superior se puede dar en el caso de los “intrus@s”. Eso ocurre cuando hay personas que trabajan en el mismo campo que tú, que no han estudiado una carrera o no la misma que tú pero que realizan funciones específicas de esa titulación (Informática es un caso muy común, por ejemplo). Es muy fácil caer en la tentación de decir “yo sé más, yo valgo más porque lo he estudiado en la Universidad. Estas personas nunca pueden llegar a saber más que yo”. Y a lo mejor es verdad para ciertas cosas, pero no tiene por qué ser cierto para muchas otras más. Cuando estudias en la Universidad te enseñan una gran cantidad de cosas. Pero siempre desde la perspectiva del profesor y las directrices que se le dan. Es cierto que sales con una capacidad de absorción de datos y de aprendizaje grande. Pero no sales sabiéndolo todo. Hay muchas cosas que no te cuentan en las clases de Universidad. Unas veces porque no da tiempo, otras veces porque no se puede incluir en el programa de estudios, otras veces porque se opta por no incluirlo en el programa.
Lo mismo ocurre con la experiencia. Cuando sales de la universidad tienes mucha teoría asimilada. Pero no tanta experiencia. Sobre todo si has estudiado en países como España. Donde la teoría es la base fundamental de lo que se aprende en la Universidad. Cuando terminas sabes mucho sobre lo que te han enseñado pero has hecho muy poquito o nada (salvo en unos pocos casos) en el campo de la experiencia. Y eso es algo en lo que cualquiera que lleve un tiempo trabajando, ya te saca ventaja. O lo que es lo mismo, sabe más sobre muchas cosas.

Beneficio:

Aunque la competencia no es la cuestión. Puedes encontrarte con formas de resolver problemas profesionales de otra forma distinta a como te han enseñado en la Universidad. Voy aún más lejos. No solamente distinta sino además de una forma que en la Universidad te habían dicho que no era posible resolver. Si te ves diciendo “mira , eso es imposible. No se puede hacer así porque en la Universidad me han enseñado que eso son patrañas. Cuando te veas en esa situación,  puedes hacer una de dos cosas:
  • no seguir escuchando y desacreditar a esa persona por ignorante, dando crédito absoluto a lo que te han contado en la universidad o
  • escuchar con curiosidad. Ver qué es lo que la otra persona tiene que decir y comprobar si es cierto o no, si funciona o no. Luego entonces puedes hacer los juicios de valor que te parezcan. ¿Y si resulta que la barbaridad que te ha dicho (en contra o de forma radicalmente opuesta a lo que te han enseñado) funciona?; ¿Y si resulta que es más fácil y más efectivo que lo que te han enseñado a ti? Lo que ocurre es que ¡te estarás perdiendo la oportunidad de aprender! De aprender de una persona que no ha estudiado o no ha estudiado la misma carrera que tú, de acuerdo. Pero estarás autolimitándote. Estarás levantando una barrera a tu crecimiento.
¿Qué ocurre si la otra persona no tiene razón o no se consiguen los resultados esperados o son más pobre que los que se dan de la forma tradicional como te han enseñado a ti en la carrera universitaria? Pues nada. Que tú puedes seguir aplicando la teoría que te han enseñado y habrás disfrutado de la oportunidad de expandir tu mente :-)
¿Piensas que al estudiar en la Universidad sabes más o menos que alguien que no tiene una carrera universitaria?
¿Alguna vez has aprendido algo de alguien que tiene menos estudios que tú?