Según un estudio dado a conocer en la revista British Journal of Educational Psychology, ver la letra A (de “aprobado” en inglés, equivalente a la B de “bien” que usan los profesores para indicar que un ejercicio se ha resuelto correctamente) puede ayudar a un estudiante a obtener mejores notas. Por el contrario, ver la letra F (de “fallo” en inglés, equivalente a la “M” de “mal” en castellano), repercute negativamente en el resultado de un examen.
Así lo han demostrado científicos de la Universidad de Missouri (EE UU) a través de una serie de experimentos con 131 estudiantes. En los experimentos comprobaron también que otras letras, como la "J", no tenían ningún efecto sobre los resultados de la prueba."De forma incosciente, ver la letra A hace que los estudiantes se acerquen al examen con el propósito de hacerlo bien, mientras que exponerse a la letra F les hace esperar el error”, aclaran.“Los estudiantes son más sensibles de lo que pensabamos las letras que implican una calificación antes de realizar una tarea cognitiva”, concluyen los investigadores.
