Vistas de página en total

jueves, 27 de diciembre de 2012

¿Por qué se olvida lo que ibas a decir?

Via Quo;


Te ayudamos a ser más inteligente con estas respuestas sobre los por qués de la vida.

¿Qué pasa cuando “tienes algo en la punta de la lengua”?

Hay dos teorías principales que explican este fenómeno.
Una sostiene que el recuerdo de la palabra está ahí, pero no es lo suficientemente fuerte como para que podamos acceder a él. La otra, dice que la memoria de la persona tiene una serie de claves genuinas para recordar la palabra pero no puede ponerlas todas juntas.

Las preguntas de índole emocional aumentan las posibilidades de que esto ocurra y, por lo general, la respuesta nos viene a la mente un rato después o varias horas más tarde.
¿Qué pasa cuando tenemos un “deja vu”?

La sensación de estar viviendo algo que ya hemos vivido con anterioridad, combinada con la certeza de que no es posible se llama deja vu.

De acuerdo con el psicólogo Chris Moulin de la Universidad de Leeds, cuando recordamos el pasado, en nuestro cerebro se “enciende” un circuito del lóbulo temporal, que está situado justo detrás de las orejas.

Esto origina en nosotros la experiencia del recuerdo. Cuando este circuito funciona mal, se produce el deja vu.

El 60% de la gente lo experimenta unas cinco veces al año Según sus observaciones el fenómeno dura unos pocos segundos.

Y lo siente el 60% de las personas unas cinco veces al año. Se produce con más frecuencia en situaciones de estrés o de fatiga y es menos habitual a medida que nos hacemos mayores.

¿Cuál es la mayor velocidad a la que alguien puede hablar en inglés?

El récord actual, en inglés al menos, es de 637 palabras por minuto, un récord en poder del comediante y presentador inglés Steve Woodmore. Eso es alrededor de cuatro veces más rápido de lo que la mayoría de la gente habla y el doble de rápido de cómo leemos.

El límite práctico es la comprensión. Más allá de las 300 palabras por minuto, no se puede distinguir claramente cada palabra. Los récords se adjudican tras grabar el discurso y reproducirlo luego lentamente.

En teoría, el límite sería la velocidad a la que los músculos faciales se pueden contraer. Las fibras musculares no se pueden contraer más que cinco veces por segundo, por lo que si uno repite "wow oh wow oh", los labios no podrían abrirse y cerrarse más de 300 veces por minuto.

Alternar entre diferentes músculos podría permitir intercalar más palabras, pero 637 definitivamente parece estar bastante cerca del límite natural.