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domingo, 8 de abril de 2012

7 maneras de leer un “ladrillo”

Con lo de “ladrillo” hago referencia a algo que no te apetece nada leer. No te ves motivad@, te aburre aquello sobre lo que trata o prefieres ponerte a hacer cualquier cosa antes que eso.

Primero lo primero

Entra en un Estado Óptimo de Aprendizaje siguiendo el método que te propongo o de alguna otra manera que conozcas.

Manos a la obra

Puedes probar una, dos o todas las siguientes (los tiempos son únicamente orientativos):
  1. desde el final del libro hacia el principio (pasando las páginas al revés, de izquierda a derecha); [menos de 10 minutos]
  2. saltándote los capítulos o secciones que quieras; [menos de 5 minutos]
  3. colocando el libro con las hojas al revés (como si leyeses el libro de otra persona que está leyendo en frente tuya); [menos de 10 minutos]
  4. ojeando primero el índice y eligiendo un capítulo o sección que te llame la atención por alguna motivo; [menos de 5 minutos]
  5. seleccionando al azar una parte del libro, empieza a leer por donde lo hayas abierto; [menos de 10 minutos]
  6. desde el principio hacia el final, parándote sólo en los gráficos, dibujos, fotos y todo lo que no sean palabras escritas; [menos de 5 minutos]
  7. pasando las páginas desde la primera a la última a la vez que ojeas el contenido. Olvídate de comprender lo que lees. Simplemente siente curiosidad por lo que el libro pueda ofrecerte o enseñar [menos de 5 minutos]

Y ahora…

… después de haber llevado a cabo algunas de las anteriores propuestas (cuantas más mejor), ya estás en buena disposición para acometer una lectura más profunda del texto empleando una forma tradicional de lectura o una distinta como la Técnica de la Cebolla
Foto: Flickr

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